¿Sabes realmente qué es un aula virtual? ¿Conoces en profundidad qué aporta al profesor y al alumno?
En este artículo te explicaremos qué es, para qué sirve y ahondaremos en sus beneficios y otros detalles para que averigües si es lo que necesitas para impartir tus clases a distancia.
¡Toma nota!
Aula virtual: qué es y cuáles son sus características

Diferencias entre aula virtual y aula tradicional
A pesar de que el aula virtual destaca por la capacidad de comunicación bidireccional, como si se tratara de una clase educativa tradicional, la virtualidad, como veremos a continuación, es lo que marca la diferencia.
En contraposición con el aula tradicional, la puerta de la clase online permanece siempre abierta y presenta una dinámica completamente distinta.
Más adelante, descubriremos qué es un aula virtual y ahondaremos en sus características. En especial, por aclarar confusiones con respecto a las plataformas de teleformación.
Por citar lo más básico:
- Las clases se imparten a través de un ordenador (sobra decir que con buena conexión a internet)
- Los formadores han de estar especializados en la metodología e-learning
- Los alumnos participan de la formación desde cualquier destino y de manera activa
¿Qué es un aula virtual de aprendizaje?

Antes de nada, cabe aclarar que un aula virtual es el entorno digital en el que se efectúa el intercambio de conocimientos que hace posible el aprendizaje online en tiempo real.
En otras palabras, un aula virtual de formación es el espacio, dentro de la plataforma elearning, donde profesores y alumnos comparten contenidos en tiempo real, y en el que se atienden consultas, dudas y evaluaciones de los participantes.
Como tal, no tiene límites físicos ni (siempre) temporales. El alumno puede acceder a ella cuando quiera para tomar sus clases, sin tener que estar sujeto a desplazamientos físicos.
En cualquier caso, puede usarse para la educación a distancia o como complemento de una clase presencial.
¿Para qué sirve un aula virtual?
Las aulas virtuales se utilizan para desarrollar las clases y son uno de los núcleos principales de las plataformas de formación.
Como adelantábamos hace apenas unas líneas, son un espacio integrado en una plataforma. Pero, además de compartir ciertas herramientas, que en seguida veremos, no son lo mismo.
Principalmente, en el aula virtual las clases se imparten en tiempo real. Sin embargo, en una plataforma elearning, el aprendiz también puede recibir formaciones de forma asincrónica.
Es decir, el alumno puede encontrar recursos síncronos y asíncronos, y los administradores y tutores, materiales para crear, impartir, gestionar, evaluar y hacer seguimiento del proceso formativo de la evolución del curso.
Entre otros aspectos, las aulas virtuales se emplean para impulsar el contacto entre el docente y los alumnos.
De hecho, son el lugar idóneo para realizar preguntas, proponer actividades o solucionar dudas, no solo planteándolas al profesor, sino sirviéndose de las propias cuestiones de otros aprendices.
En concreto, las aulas globales son una de las vías empleadas para involucrar al alumno fomentando la interacción, ya que están dotadas de ciertas herramientas que lo hacen posible.
Nos referimos a los chats, foros o videoconferencias, que son ideales (o al menos deben serlo) para comunicarse con los profesores y alumnos de forma directa y fácil.
Por otra parte, también ofrece instrumentos para crear y subir materiales audiovisuales de clase, y otros para seguir la evolución de los aprendices a lo largo del curso.
En definitiva, con un aula global puedes impartir tus clases sin complicaciones y alojar gran cantidad de contenidos de fácil acceso y descarga (por temas o módulos).
¡Ahora que sabes qué es un aula virtual, sigue leyendo y conoce sus beneficios!
¿Es compatible con el aula tradicional?
Por supuesto que sí. El aula virtual y la tradicional presencial no solo son compatibles, sino que se potencian mutuamente multiplicando las bondades de cada uno de los modelos.
La formación presencial, cuando se apoya en el aula virtual, cuenta con recursos extra que facilitan el proceso formativo. El aula virtual se convertirá en una prolongación de la materia impartida en clase, ya que permite adaptar los contenidos al ritmo y estilo de aprendizaje de cada alumno.
Los profesores podrán incluir material complementario, actividades de repaso, videos para que los alumnos interioricen mejor los conocimientos. Además, podrán mantener una comunicación más fluida con los alumnos. Ya no solo tendrán contacto durante la clase presencial, sino que contarán con videollamadas, chat, mensajería o foros donde compartir impresiones y conocer cómo viven los alumnos la formación impartida. El seguimiento de los alumnos va a salir fortalecido con el aula virtual, ya que, en ocasiones, cuando el alumno sale por la puerta, perdemos su pista.
El aula virtual se puede convertir en un punto donde centralizar todo el curso, no solo para clases en tiempo real, simulando la formación presencial, sino para mantener una comunicación más fluida entre los diferentes actores de una formación, consiguiendo así un mayor éxito en la tasa de finalización. Por lo tanto, el aula virtual y el aula tradicional son 100% compatibles y convenientes.
¿Para quién es útil un aula virtual?
Como comentábamos anteriormente, el aula virtual siempre va a ser beneficioso ya que prolonga la experiencia de la formación presencial. Será útil tanto para centros de formación, como empresas o cualquier tipo de organización, principalmente si nos fijamos en los siguientes perfiles:
- Para quién quiere o necesita estudiar a su ritmo: ya sea porque le gusta organizarse a su manera o porque los compromisos laborales o familiares no se lo permiten, el aula virtual es la herramienta ideal para ellos. Los alumnos podrán adaptarse mucho mejor a las clases.
- Para quién la distancia es un problema: bien porque se encuentre en una ubicación diferente o porque cuente con movilidad reducida. El aula virtual le permitirá seguir las clases también en tiempo real sin perderse nada, con la comodidad de conectarse desde dónde lo necesite.
- Para alumnos con necesidades especiales: el aula virtual será una herramienta clave y una opción inclusiva para alumnos con discapacidades o necesidades especiales. Podrán contar con subtítulos, ajuste de volumen, ajustes visuales y otros para seguir correctamente la formación.
- Para profesores que quieren ofrecer una valor añadido: en muchas ocasiones el tiempo es limitado y los profesores quieren transmitir más información para que los alumnos estén mejor preparados y satisfechos con el curso. El aula virtual le permitirá tener una comunicación directa entre usuarios para ofrecer material extra o un mayor número de sesiones que, de forma presencial sería insostenible.
Diferentes tipos de aulas virtuales
Según las necesidades de la empresa o centro de formación, se podrán contar con aulas virtuales más o menos completas:
- Aula virtual tradicional (LMS): las más completas, plataformas como evolCampus desde donde impartir y gestionar toda la formación: desde matrículas, creación de contenidos, dinamización e interacción, seguimiento, evaluación y análisis de los cursos. Son ideales para centralizar todo el proceso formativo.
- Aula virtual colaborativa: aquellas como Google Classroom o Microsoft Teams, más simples, que se reducen a fomentar la colaboración entre los alumnos a través de chats, foros y documentos compartidos. Facilitan el trabajo en equipo, las discusiones en grupo y el intercambio de ideas.
- Aula de aprendizaje autónomo: plataformas como las conocidas Coursera o Udemy, donde los alumnos aprenden a su propio ritmo con recursos que se encuentran siempre disponibles para su consulta.
- Aula virtual en vivo: herramientas como Zoom o Google Meet, que además del uso a nivel personal o profesional en el mundo de la empresa, también se utilizan para realizar clases en tiempo real, permitiendo la interacción directa entre docentes y alumnos. En este modelo, la comunicación es directa entre estudiantes y docentes, se produce la interacción en vivo, con la posibilidad de compartir pantalla o el uso de pizarras digitales.
- Aula gamificada: estas aulas incluyen mecánicas de juego para hacer el aprendizaje más interactivo y motivador, como en Kahoot o Classcraft. Con estas se promueve el aprendizaje activo utilizando la consecución de puntos, logros, recompensas y otros elementos de competencia para hacer el aprendizaje más atractivo. Son ideales para temas complejos o que requieren de una alta participación.
- Aula adaptativa: plataformas que personalizan el contenido según el progreso del estudiante, adaptándose a sus necesidades. Esto se consigue mediante algoritmos de inteligencia artificial, permitiendo una educación a medida.
- Aula híbrida: combina lo mejor de las clases presenciales y las virtuales, ofreciendo flexibilidad a los estudiantes, como en el modelo de blended learning. Disponen de interacción presencial, virtual en tiempo real y además acceso a contenidos complementarios. Una experiencia muy completa para el alumno, que integra lo mejor de los dos mundos.
- Aula inclusiva: diseñada para estudiantes con discapacidades, con herramientas accesibles como lectores de pantalla o subtítulos. Favorece la integración de todos los alumnos, garantizando el acceso equitativo al conocimiento.
- Aula no formal (capacitación): Para formación profesional continua, con cursos breves y prácticos, como LinkedIn Learning. Aquí los estudiantes acceden a cursos orientados al desarrollo de habilidades específicas para su carrera o intereses. Suelen tratar una gran variedad de temas con un enfoque breve y práctico para poder aplicarlo a corto plazo.
- Aula de evaluación continua: permiten realizar evaluaciones frecuentes con retroalimentación instantánea, como Quizlet. Son útiles para identificar áreas de mejora a tiempo a través de evaluaciones automatizadas, exámenes interactivos y una retroalimentación instantánea.
Ventajas y desventajas de un aula virtual

Aula virtual: ventajas
¡Qué es un aula virtual sino beneficios!
Adiós a las barreras geográficas
Para empezar, esta herramienta da acceso a una amplia cantidad de docentes y establecimientos educativos en todo el mundo.
A la vez, hace posible que los estudiantes puedan compartir conocimientos con otras culturas, rompiendo así las barreras de comunicación, ubicación y tiempo.
Ahorro de tiempo y dinero
Luego, permite hacer más con menos. Es decir, economizar en recursos materiales como cuadernos, hojas e impresiones, pues el contenido ya está disponible en línea.
También supone un ahorro de tiempo. Al permitir la conexión desde cualquier lugar y momento, no solo reduces gastos, sino que suma horas para invertir en otras tareas.
Más recursos, nuevas posibilidades
Como sabes, debemos ofrecer a los alumnos materiales en diferentes formatos.
Al suministrar recursos en audio y vídeo desaparece la monotonía y los aprendices tienen la opción de acceder a las grabaciones cuando quieran. Al final, hacer e-learning va de eso, ¿no es cierto?
Aprendizaje diferenciado y flexible
Después, se trata de una solución idónea para facilitar la asimilación de conocimientos sin caer en la desmotivación.
De esta manera, los estudiantes con mayores dificultades logran más confianza y seguridad en sí mismos, ya que acceden al material en cualquier momento.
Al mismo tiempo, pueden auxiliarse con documentos complementarios y contar con el apoyo del tutor u otros compañeros de forma colaborativa.
Interacción continua
Del mismo modo, el alumno puede estar informado de los horarios de actividad del profesor para la realización de consultas o tutorías, algo que propicia la cohesión del grupo.
Responsabilidad sobre el aprendizaje
Por último, queremos destacar que la tecnología, entre otras cosas, hace posible la ordenación de documentos y su disponibilidad.
Es decir, los estudiantes pueden acceder a ellos siempre que quieran.
Por ello, aquellos alumnos con problemas de organización, encontrarán en el aula virtual una nueva manera de aprender más flexible.
Aula virtual, desventajas
Desde luego que hay desventajas, no te vamos a engañar.
Por suerte, estas no resultan una amenaza, ya que la mayoría pasan por el factor humano y son solucionables.
El papel del docente
Tanto en un aula global como en un campus virtual o en una plataforma de formación a distancia, el rol del profesor online es determinante.
Es decir, el profesor ha de estar cualificado y contar con ciertos requisitos, como el dominio de las tecnologías, la creación de materiales digitales o ser un buen orientador en ese entorno. Esto, por citar algunos.
Por tanto, si el docente no está familiarizado con la formación e-learning, apostar por un aula remota puede resultar negativo.
La tecnología
A su vez, encontramos el hándicap de la tecnología y las malas conexiones a internet.
En este sentido, los alumnos han de contar con los recursos tecnológicos suficientes para acceder a las clases virtuales. Y, por supuesto, poder asistir a ellas con normalidad y sin riesgo de caídas de la plataforma educativa o de internet.
Ya sabes qué es un aula virtual, los inconvenientes que puede acarrear y las comodidades que ofrece a la enseñanza.
¡Profundicemos ahora en las herramientas que debes encontrar en ella para cumplir con tus objetivos formativos… y con los de tus alumnos!
Herramientas de una clase virtual

¡Cómo hacer una clase virtual con fundamento si no contamos con las herramientas necesarias!
Estas son las adecuadas para lograr buenos resultados:
- Contenidos audiovisuales y materiales de las distintas asignaturas.
- Agenda de eventos y actividades.
- Mensajería interna para la comunicación bidireccional asincrónica entre profesores y alumnos.
- Foros de debate para la realización de actividades.
- Chat para que los aprendices interactúen con el profesor.
- Tareas y actividades varias. Tanto subidas como descargas por parte del alumno y del docente.
- Test y exámenes de desarrollo o de auto entrenamiento configurables.
- Certificados o diplomas que los estudiantes puedan descargarse.
- Calificaciones de exámenes, tareas o foros.
- Videoconferencia para realizar sesiones de trabajo, tutorías o seminarios web (con su correspondiente pizarra digital online).
- Informes de progreso del alumno o del curso.
Consejos sobre cómo crear un aula virtual
En primer lugar, a la hora de crear un aula virtual has de contar con la logística necesaria para la educación a distancia.
Hablamos de:
- Ordenador
- Cámara web
- Smartphone o tableta
- Auriculares con micro
- Conexión a internet
Una vez hallado lo elemental, estaremos capacitados para crear el entorno de la clase.
¡Estas recomendaciones te vendrán de fábula!
1. Define muy bien el tema de tu clase y el objetivo que persigues con la misma.
2. Conoce en profundidad la plataforma, las posibilidades y herramientas que tendrán que utilizar tus alumnos y tú.
3. Equípate de recursos tecnológicos suficientes por si alguno de los que usas falla repentinamente.
4. Prepara al detalle la clase para así ir al grano y aclarar rápidamente cualquier duda que surja de las lecciones.
5. Ponte en el sitio del alumno y prueba a simular la clase para observar qué va a encontrar y establecer soluciones o mejoras.
6. Involucra a los alumnos con ingenio, valiéndote de contenidos variados y haciendo uso de las herramientas que ofrece la plataforma.
7. Controla el ambiente desde el que impartirás la clase virtual (iluminación, sonidos ambientales, colocación de la cámara).
8. Presta atención a tu apariencia, postura y voz.
Entiende mejor qué es un aula virtual: ejemplos

En realidad, existen muchas plataformas de aulas globales o virtuales.
No obstante, para que una clase remota pueda impartirse con total calidad y comodidad, ha de integrar una serie de cualidades, muchas, naturalmente, relacionadas con la plataforma en la que llevarás a cabo la clase a distancia.
evolCampus, sin ir más lejos, ofrece un aula virtual diseñada para que cualquier persona pueda utilizarla con total agilidad, por muy ajena que le resulte la formación a distancia.
Asimismo, ofrece los instrumentos sincrónicos y asincrónicos, que requieren las clases en línea.
Estos son:
- Tablón de anuncios desde el que enviar mensajes e informar sobre actividades, comunicaciones, ejercicios…
- Calendario para programar actividades, videoconferencias o cualquier otro evento
- Foros de debate donde desarrollar actividades grupales
- Mensajería interna con el fin de compartir información, normas o archivos con alumnos o profesores
- Chat para que docentes y alumnos interactúen
- Videoconferencias (Zoom, Microsoft Teams, Google Meet y otros proveedores referentes)
- Certificados y acreditaciones personalizables y descargables
- Informes de seguimiento de alumnos, profesores, actividades…
Gracias a la integración de estos recursos, la actividad educativa y el diálogo entre docente y alumno es excelente.
Además, cuenta con otras herramientas útiles para:
- Subir o crear contenidos multimedia y para administrar clases online de manera rápida y automatizada
- Evaluar y hacer seguimiento del curso
Igualmente, es un aula adaptada para impartir formación bonificada a empresas, ya que cumple rigurosamente con la normativa en cuestión.
En definitiva, las aulas virtuales forman parte del presente (más aún tras la pandemia).
Tanto si quieres ofrecer clases complementarias a un plan de estudio hasta un programa combinado o una formación completamente en línea, busca un paradigma de aprendizaje fácil, cómodo y efectivo.
¿En qué se diferencia el aula virtual de la plataforma LMS o elearning?
Llegando al final de este post, algunos quizá tengáis ahora la necesidad de puntualizar las diferencias entre aula virtual y plataforma LMS o plataforma elearning para saber qué escoger. Ambas expresiones, según el contexto, se utilizan indistintamente, pero aunque relacionadas entre sí, cumplen con funciones diferentes dentro de la formación online.
Un aula virtual es un espacio de enseñanza y aprendizaje online donde los estudiantes pueden interactuar tanto con los recursos como con el docente y otros compañeros. En un aula virtual, las herramientas de comunicación y colaboración son esenciales: foros, chats, videoconferencias y pizarras digitales, ya que facilitan la interacción constante. El objetivo principal del aula virtual es ofrecer una experiencia de aprendizaje activa y participativa, donde los estudiantes no solo consumen información, sino que también pueden compartir ideas, resolver dudas y colaborar entre sí en tiempo real. Además, suele permitir la integración de recursos multimedia (videos, podcasts, lecturas interactivas), lo que favorece un aprendizaje dinámico y flexible.
Por otro lado, una plataforma LMS o plataforma elearning concentra todo en una misma plataforma, estando orientada a impartir y gestionar todo el proceso formativo. Permite organizar, distribuir y seguir el progreso de los cursos y los alumnos. Las plataformas LMS pueden incluir todo lo necesario o solo ciertas funcionalidades interactivas, ya que están más enfocadas en la estructura del curso: gestión de inscripciones, distribución de materiales, administración de evaluaciones y seguimiento del rendimiento de los estudiantes. La interacción en algunas de estas es más limitada, generalmente centrada en la entrega de tareas y exámenes.
En resumen, la principal diferencia radica en el enfoque. Mientras que el aula virtual se centra en ofrecer un entorno interactivo, flexible y colaborativo para el aprendizaje activo, el LMS tiene como objetivo la gestión eficiente de los cursos, administrando recursos, evaluaciones y el seguimiento del rendimiento de los estudiantes. Ambos son complementarios, pero cumplen roles distintos dentro del ecosistema educativo en línea. ¿Lo mejor? Una plataforma donde centralizar todo el proceso, simplificando así el trabajo de tutores, profesores y administradores.